Los principios de esta bebida eléctrica se remontan a cuando Sergio Padilla, conocido barman español, empezó a experimentar con la peculiar flor de Szechuan mientras trabajaba en el bar Boca Chica de Barcelona.

Sin embargo, fue en vasto y polvoriento desierto de Black Rock City en Nevada cuando, durante Burning Man, el verdadero concepto de Voltaje nació. Sergio y su compañero de aventuras Alberto crearon algo que dejó boquiabiertos a los visitantes de un humilde y peculiar casino regentado por nuestros protagonistas.

Como dos alquimistas modernos, Sergio y Alberto se embarcaron en una odisea para perfeccionar su poción. No se trataba solo de mejorar la receta, sino de infundir en ella la esencia de esa aventura, su pasión por la innovación y el espíritu indomable vivido en Burning Man. Querían crear algo extraordinario, una bebida que fuera un viaje sensorial, una aventura en cada sorbo.

Después de años de experimentación y pruebas, finalmente perfeccionaron la receta. El resultado fue un licor de tequila eléctrico que es tanto una explosión de sabor como una experiencia sensaciones en boca. Cada sorbo de Voltaje es un recordatorio del viaje que Sergio y Alberto han realizado juntos, desde el bar Boca Chica en Barcelona hasta las arenas de Burning Man.

Hoy, Voltaje es más que una bebida. Es la historia de dos amigos, unidos por su pasión por la mixología y su deseo de crear algo único. Es un testimonio de su viaje, de su amistad y de su espíritu innovador. Y con cada botella de Voltaje que se abre, Sergio y Alberto comparten un poco de su historia con el mundo.